martes, 19 de abril de 2016

CRITICA DE TV - Aquí mando yo (1/10)

Gogglebox versión rebajas en el rastro




He de reconocer que cada vez veo menos televisión “en directo”. Hay demasiada oferta y poco tiempo. Pero uno de los formatos que más curiosidad me despierta a la hora de seleccionar qué ver  en Inglaterra es Gogglebox. Un formato ameno y divertido cargado de personajes carismáticos y a la vez informativo en esa especie de zapping comentado.

Gogglebox UK tiene una fuerza imparable, premios (Bafta incluido), reconocimiento, popularidad (algunos de los personajes han participado después en Celebrity Big Brother o varios anuncios) y merchandising alrededor que va desde un libro oficial a camisetas y derivados.

Por eso sentía curiosidad de ver su homólogo español. El anuncio del off por Miky Nadal me daba cierto miedo. Y no porque crea que el presentador carezca de talento, que le sobra, sino porque en la versión inglesa la voz es un mero conductor sin opinión que da un aire de calidez. Por momentos pensé que querían recrear el espíritu de “Sé lo que hicisteis” y quedarse en el camino. Afortunadamente no ha sido así, y Miky Nadal se ha quedado en muy segundo plano como el formato invita.

Creo que ese punto ha sido el único punto positivo, porque el resto ha sido un desastre.

En España tenemos el problema de no poder emitir ni una sola imagen de un programa de Mediaset en ningún medio sin miedo a que no te desangren económicamente. Pero aún así todavía hay más tele ahí fuera, si se escoge bien.

Y ahí radica el primer problema, demasiada poca cosa vi: fútbol, George de la jungla (o como se quiera hacer llamar ahora), top dance y poco más. Y sinceramente nada que aportar. Ni era una selección ilustrativa, ni me interesa ver a un forofo del Barcelona diciendo a uno del Atlético que no vuelva más porque sino pierden, ni a uno del Madrid gritando porque para eso hay muchos bares por España… Había un interés nulo por saber sus opiniones, porque hablaban de algo muy poco destacado o que no aporta absolutamente nada. 

En la versión inglesa ponen los momentos más incendiarios de la semana, noticias, series que han tenido un gran giro, expulsiones del factor X, Strictly come dancing, The great british bake off… lo que la gente habla y comenta. Y no el resultado del City contra el liverpool, porque ya sabemos que el forofo de un equipo se va a alegrar cuando su equipo gane ¿no?  

El segundo gran error es el casting. La versión española ha carecido de personalidades delimitadas, el matrimonio geek y las gallegas fueron de lo poquísimo destacable. Y la diferencia es que en Inglaterra cada uno de los integrantes del casting lo es desde un target diferente y localidades diferentes. Adolescentes, inmigrantes, jubilados, burguesía, bohemios, personas de color… cada uno es una porción diferente de la sociedad británica.

No me meto con las elecciones en particular, ya que a penas ha habido tiempo para conocer o desarrollar a muchos de ellos. Sí que me ha parecido demasiado anárquico y extenso y a veces todo excesivamente forzado y más falso que un anuncio de Avon de Chenoa (esa conversación sobre los muñecos de los Geek ha sido de juzgado de guardia)

En Inglaterra anuncian que si votas a tal partido te van a devolver 200 euros… pues ofrecen reacciones entre gente más humilde y gente más rica. Juventud y jubilados… distintos puntos de vista que enriquecen el programa. En España solo vemos a un forofo del Madrid gritar gol cuando marcan. 

Apasionante.

Pero el mayor error de “Aquí mando yo” es el montaje. Un completo y absoluto desastre. En la versión británica puedes seguir lo que pasa en el programa y lo intercalan con un par de opiniones. En la española veías 4 segundo de baile de top Dance y lo interrumpían con 4 reacciones una tras otra parando totalmente el ritmo.
Para alguien que no ha visto el programa en cuestión del que hablan (como yo) es imposible saber qué sucede o por qué han seleccionado ese fragmento y no otro. El de George de la jungla es el ejemplo palpable: TODOS hablan sobre sus zapatos croocs sin que haya pasado nada, y nos enseñan a todos y cada uno diciendo algo. Suena a productor señalando qué decir y dónde mirar y no a alguien diciendo algo espontáneo, además con una opinión de quién sea me sirve, no necesito 4 parejas una tras otra diciendo lo mismo, ese tiempo lo podían emplear en mostrarme más del fragmento seleccionado, porque así no me entero de nada y es solo un puñado de gente diciendo lo mismo.


En resumen, “Aquí mando yo” es un gran formato muy mal llevado. El resultado es una tontería absoluta, mal planteada, con un mal casting y producción y una ejecución francamente amateur y falsa. Una verdadera lástima que se hace realmente insufrible. 
A otra cosa.

miércoles, 23 de marzo de 2016

AGENTE CONTRAINTELIGENTE (The brothers Grimsby, 2016) - **1/2

Chavs salvando el mundo



La idea de un James Bond de andar por casa, con pocas luces y dado a cometer un error tras otro no es nada nueva: Austin Powers, Johny English o mil y un “compañero de aventuras del bueno”, alguien que se ve arrastrado por las circunstancias en medio de una misión enorme. La diferencia de  “Agente contrainteligente” (traducción rocambolesca de “Los hermanos Grimsby”) es que ésta lleva el sello de Sacha Baron Cohen y eso ya significa algo.

Es curiosa la historia del cómico inglés que ha creado personajes tan fuertes y delimitados como Ali G, Borat, Brüno y en menor medida su dictador, película anterior a la que nos acecha y que ya ofreció cierta dosis de agotamiento de su premisa. Exceptuando “Borat” (verdadero canto del cisne del autor) en su diseño de personajes es dónde nacen y mueren sus planteamientos, crea grandes personalidades y los termina agotando en repetir las mismas superficialidades y bromas. 

En su última película, la premisa de la cinta parte de una crítica a la “sociedad trabajadora inglesa”, o mejor dicho la no trabajadora, la que llena programas como Benefit Street o se sienta a diario en el show de Jeremy Kyle a descubrir tests de paternidad o si se han engañado mutuamente en la máquina de la verdad. Los denominados “Chavs” (algo así como los chonis españoles) gente que gusta de no trabajar y vivir de subvenciones del estado por sus numerosos hijos, su incapacidad para encontrar empleo (que ni siquiera buscan), que visten chanclas y calcetines y que se dedican básicamente a ocupar espacio viendo el fútbol en el pub local de barrios marginales de las grandes ciudades. En la cinta es la ciudad de Grimsby, elegida por varias publicaciones como el peor lugar para vivir en Reino Unido.

Creando un estereotipo de Chav separado de su hermano de pequeño al que echa tanto de menos que mantiene su habitación intacta desde que se separaron y ahora es un agente de inteligencia británica con el que se ve inmerso en una película de espías a lo James Bond donde el argumento no es más que una excusa para desarrollar un gag tras otro, todo con un barniz de sal gorda que hace que algunos den en la diana y otros sean una repetición tras otra. Bromas de carácter sexual y nada sutil en general, con un par de aciertos en crítica a la cultura chav pero escondida entre bromas groseras y chabacanas.

Es una de esas películas que es a duras penas es una película ya que nada sigue una lógica, sino que es una mera excusa para introducir más bromas y algunos personajes solo están ahí para ofrecer el chiste (el personaje de Gabourey Sidibe no es ni siquiera un personaje).  

Todo ello bajo la batuta de Louis Leterrier (“El increíble hulk”, “Furia de Titanes” y “Ahora… me ves”) que parece empeñado en introducir una cinta de acción como puede en la comedia y no termina nunca de encontrar el equilibrio para poner a Baron Cohen a merced de la historia y no al revés.

Respecto a la aportación española, Penélope Cruz al menos sostiene su personaje con dignidad entre mucho descontrol (me refiero a que por lo menos no ha sido utilizada para una broma del tipo Gaboury Sidibe).

En resumen “Agente Contrainteligente” es probablemente la peor película de personajes de Sacha Baron Cohen y un caos de humor escatológico pero que sin embargo puede funcionar bien en un determinado público concreto. A los que busquen algo más, hay poco más que rascar que una película entretenida con un par de chistes acertados que llegan hasta a incorporar a Donald Trump y Daniel Radcliffe pero un conjunto en términos generales ineficaz. Una pena.

Lo mejor: Las críticas a la cultura Chav
Lo peor: Algunos chistes alargados hasta el aburrimiento (los elefantes)


Valoración: 5/10

martes, 22 de marzo de 2016

CRÍTICA DE TV - LOVE (8'5/10)

“No sé para qué me lo tomo tan en serio, dicen que las mamadas son como antes enrollarse”



Netflix está optando por series con un foco muy personalizado y estudiado, con unos targets de público muy concretos para conseguir posicionarse en prácticamente todos los mercados. Cierto que han apostado por grandes series de calidad imanes para los premios como "House of Cards" o "Narcos", pero también series y productos que buscan un target muy específico de mercado como fue “Frankie and Grace” o la que nos ocupa “Love”.

Y es que Love, producida por Judd Appatow, es muy similar a lo que fue "Girls" (mismo productor), pero todavía bebiendo mucho más del cine independiente y creada muy específicamente para un grupo de millenials, de jóvenes buscando el amor del siglo XXI entre relaciones cada vez más líquidas y de afrontar la madurez en la nueva generación por parte de unos personajes que representan al completo esa cara de la juventud, apática, egoísta, adicta a la tecnología, crecida entre algodones e incapaces de asumir responsabilidades. ¿La voz de una generación como decía Lena Dunham en Girls?

No. Pero sí reflejando una realidad que el cine con sus esquemas de “comedias románticas de dos estrellas y media” ya no representan en versión mainstream: la realidad y con personajes reconocibles. Incluso en “Y de repente tú” (Trainwreck, también de Appatow) la cosa se terminaba convirtiendo en típica y funcional tras un arranque suficientemente centrado en la realidad.

El argumento de “Love” cuenta la historia de Mickey y Gus y nos los muestran tratando de recuperarse de dos rupturas que los han dejado sin rumbo. Y de repente tropiezan en la vida y tratan de poner un pie detrás de otro apoyándose inconscientemente el uno en el otro.

Love se circunscribe en esa especie de productos hipsters y modernos y es en su estilo pausado, en su formato río (como una película larga troceada) y en su cercanía a la realidad de quejica “loser” donde encuentra su verdadera autoría y voz. Entre sus principales temas no son únicamente los amorosos sino que principalmente es el paso del tiempo a la madurez, ahora más tardía para todos y con los problemas de encontrar estabilidad y aceptar las responsabilidades.

sábado, 5 de marzo de 2016

¡Ave, César! (Hail, Caesar!, 2015) - **

Los que van al cine a dormir te saludan







Cuando veo algunas películas de los Coen tengo un cierto resquemor de no saber si no entiendo lo que estoy viendo o directamente no me gusta y no me parece bueno. Y no me refiero a grandes peliculones incontestables como “El gran Lebowsky”, “No es país para viejos” o “Fargo”. 
No. 
Me refiero a sus obras “menores”, totalmente intrascendentes para mí como “Quemar después de leer” o “Un tipo serio”, películas a las que le veo el por qué, una historia verdaderamente jugosa y con potencial, con momentos brillantes pero con una sensación general de no entretenimiento durante su visionado. 
Me explico, son películas que disfrutas mucho más pensando y escribiendo sobre ellas que realmente viéndolas. Con eso dicho, nunca podemos considerarlas como “malas”, porque la calidad está ahí, pero sí como fallidas. En ese grupo englobo “¡Ave, César!” su última obra ahora en nuestras pantallas que la podemos considerar como aceptable entre las “menores”.

La película gira en torno a la figura de un ficcionado Eddie Mannix, interpretado por Josh Brolin, un “arregla cosas” en los años dorados de los estudios de Hollywood. Y es ahí, en medio del rodaje de una grandísima super producción de los años 50 en torno a un soldado romano en los tiempos de Cristo cuando la película arranca con el secuestro de la super estrella y las tareas de este personaje por tratar de encontrarle mientras trata el día a día de las estrellas de los años 50.

Y el planteamiento es donde toda la película brilla como una de las grandes, con números “homenaje” al cine de los 50 (westerns, musicales, melodramas, dramas épicos…) y unas historias cruzadas con un buen planteamiento: desde una diva sureña soltera y embarazada pero que arrasa en el cine por su imagen cándida y de niña buena (genial Scarlett Johansson), el de trasladar a un artista de los westerns al drama y lidiar con director y actor hasta los tejemanejes a mantener con la prensa, la religión y hasta la política en un escenario al borde de la caza de brujas comunistas. Y todo ello en un tono ligero, de comedia absurda marca de la casa, pero cuidado, no es una comedia al uso.

Súmale un reparto más que excepcional encabezado por George Clooney, Tilda Swinton, Channing Tatum, Jonah Hill, Frances McDormand o los ya mencionados Brolin y Johansson.

¿Entonces qué falla?
Pues que los Coen se han olvidado que están haciendo una película para ser vista y hay tres factores clave que no funcionan. El primero es el del ritmo y entretenimiento, ninguna escena construye a otra, no hay momento, suspense o fascinación por ver qué va a suceder. Hay una escena tras otra, unas geniales y otras… otras que nos llevan al punto dos. Hay muchos chistes que sólo funcionan una vez, y se repiten una y otra vez (como las gemelas Swinton) y otros simplemente no tienen gracia (todo el segmento Jonah Hill). Y el tercero y más importante es que las historian no tienen ningún desarrollo: empiezan y terminan sin ningún conflicto o prácticamente interés.

Mientras el metraje va avanzando, siempre estás con una sensación vacía de no saber qué te quieren contar y más importante si tienes interés en saber qué va a suceder por esos personajes e historias, y cuando algo así funciona, ya puedes tener el mejor elenco de actores o una crítica subyacente, si no me interesa lo que sucede en pantalla y no me mantienes el interés por ninguna de las historias hasta el punto de olvidarme bastante a menudo de ellas. 

En resumen, estamos ante una buena película (sobre todo para los estándares actuales) pero fallida por tantos lugares (guión principalmente, falta cohesión y conjunto) que se queda en un conjunto descafeinado y poco interesante. Y es una pena, porque con mayor cohesión y presencia de las historias estarían ante una de las mejores películas de los Coen, pero como a uno le toca juzgar lo que hay y no lo que le hubiese querido que hubiera, nos toca pasar página, mandar a los Coen a rezar 5 Ave Marías y esperar a que la próxima sea más redonda. Una pena.

Lo mejor:  Los números homenajes de Johansson y Tatum
Lo peor: El guión poco desarrollado
Valoración: 4/10

jueves, 21 de enero de 2016

Crítica de las canciones candidatas a Eurovisión


It's like 1999 again

Hoy Televisión Española nos ha hecho rejuvenecer a todos al menos 13 años ¿Cómo?
Publicando las canciones que competirán por ir por España al próximo festival de eurovisión, y es que ninguna de ellas suena a 2015 y más bien suenan a propuestas que hubiesen sido “algo” hace unos años y que ahora se presentan a la desesperada. Hemos pasado de artistas queriendo resucitar sus carreras, a compositores queriendo resucitar canciones que estaban muertas y que no tienen ni un punto “revival”. El desastre no es absoluto, porque no dan vergüenza ajena, pero ninguno de ellos tiene ese factor ganador de la primera escucha. 

Bueno.
Otro año será.
Quiero decir por lo de vergüenza ajena, que es lo que nos hace amar estas cosas.

1- Barei
La chica de la que no sabíamos nada y que cantó en punto pelota. Casi nada. Se presenta por un tema que ella dice ser soul y música negra influenciada por vete a saber qué o dónde. A mí me suena a pop electrónico con toques de Dance y descarte de Lady Gaga. Se supone que está producida por Victor Púa que fue de OT y que he tenido que buscar en google.
Aún así es lo más “aceptable” de la preselección y le permitirá tener una canción escuchada en spotify. En directo puede hacerla ganadora o ser un completo desastre.

2- Maria Isabel
Ella ha venido aquí porque tiene poco que hacer en casa. Su disco ha sido un desastre a todos los niveles tanto creativo como comercial. Tras darle una escuchada en su mp3 ha decidido ir con su single porque ya que se ha gastado 4 euros en su videoclip, al menos que lo vea alguien. Si su disco hubiera funcionado se habría reído de la idea de volver a eurovisión, como no estamos en 2003 y ese refrito de rechazos de bellepop con cada canción es un estilo nota llegado a nada ella ha ido dónde le mandan, y por más videos que se grabe en vertical con su móvil diciendo lo mucho que quiere volver todos sabemos que lo hace por ver Estocolmo y sacarse unas vacaciones pagadas. 

3- Electric Nana
La “indie” que canta con Carlos Jean y que hasta ella se ve incómoda por esa etiqueta que TVE le ha endosado porque no es indie, es simplemente desconocida. Dice que ha compuesto su canción pensando en eurovisión y se nota, porque su discografía es bastante buena y esta canción es un despropósito con tres canciones diferentes: la primera es la estrofa que es aceptable, luego un estribillo que es un caos acelerado y luego una parte en castellano que me recuerda al disco que hundió la carrera de Natalia y que hace que la canción suene rara. En el mal sentido. Y todo ello en 2 minutos 20 acelerados de speed que me hacen querer que terminen. Ha sido una decepción tremenda, ¿por qué los artistas se traicionan a sí mismos por querer encajar en eurovisión con algo diferente en lugar de ser ellos y su música? ¿no aprendimos con Edurne?

4- Salvador Beltrán
¿A que no hay huevos…? 
Así empezó esta aventura Salvador sobre unas cañas con sus amigos. y ha terminado entre los seis finalistas con esta canción que suena caducadísima hasta para Cadena Dial. Oye, al menos el chico le pone ganas y sabe que quedará último, pero a falta de Pablos (Alborán y López) al menos él se lo pasará bien en el escenario. Supongo. Y por lo menos es su rollo y puede atraer seguidores. Sus fans actuales contentos porque su mágica es expuesta en televisión y más gente le va a conocer. Buena jugada sin traicionarse. Ahora, para mí es un no.

5- Maverick
Al que le sonríen las galletas. Me descojono. Él ha enviado, supuestamente, dos canciones a la previa y han escogido esta. Espera. Olvidé la acentuación. 
¿Ha enviado DOS canciones y han escogido ¿¿¿ÉSTA??? 
Es un jodido despropósito repetitivo hasta rellenar 3 minutos, que porque no puede durar 4 minutos, si no repite el estribillo otro minuto más. Suena tanto a pachanga verbenera vergonzosa que suena en la boda de tu primo y tu padre intenta bailar como si hubiese ido a clases de salsa en los 80. De verdad que no tiene nada internacional o rompedor en ella. Lo siento por Maverick, del que no conozco nada musicalmente (no vi la voz) pero parece que su carrera ha nacido muerta ¿cómo remontas la imagen de cantar ¿¿¿ÉSTO??? ? Que se haga un Coralazo y retire su candidatura o diga que tiene ebola y no puede ir. Es por su propio bien.

6- Xuso Jones
A favor voy a decir que es de los pocos que de verdad parece que x o por y ha pensado en el proyecto y ha llevado a algo que suena “suyo”. Sí, suena a Suecia y es una mezcla de Glorious, Héroes y Euphoria. Pero es más o menos su tipo de estilo. Es cierto que suena a mucho y repetido y llevar a algo que suena a algo que funciono el pasado año suele significar hostiazo de recordar (aquel Tooji de Noruega a lo Saade, Cascada…) pero si consigue teclear las buenas teclas puede dar con el piano. Pasando de eurovisión la escucharía, ahora veo hostiazo de libro.

Veredicto:
Decepción más grande: Electric Nana y Maverick. 
Bien por ti chaval, pero no: Salvador Beltrán.
Interrogación positiva: Barei
Caducada pero que dará pie a memes: Maria Isabel
Canción que bautizarán como la segunda venida de Jesucristo y quedaremos 21: Xuso Jones 

Veremos pero creo que la cosa estará entre Xuso, maria Isabel por la nostalgia y Barei si se saca algo bueno de la manga en el directo.


Aún así, ¡suerte a todos!

lunes, 11 de enero de 2016

Globos de Oro 2016


Superficialidad inocua




Como muchos de vosotros ya sabéis la temporada de premios son una de mis pequeñas y favoritas fascinaciones, aunque con los años he ido cambiando la aproximación a ellas: He pasado de fanatismo por mis candidatos preferidos a tratar de acertar una quiniela de arriba abajo a dejarme llevar por lo superficial de todas las entregas y premios y dedicarlas a recolectar títulos, nombres y obras que habían pasado por alta.

Por ello los globos de Oro me han dejado muchas anotaciones en mi pequeña agenda, una gran alegría y muchas sorpresas predecibles desde que estos premios (votados por una minoría de personas alucinante, unas 90 personas) son dados a premiar “lo nuevo” en televisión y tienen un grupo de nombres por el que babean sin importar lo demás (Amy Adams, Kate Winslet, Jennifer Lawrence, Renee Zellgwer, Angelina Jolie Helen Mirren…).

Aún así estos premios son mucho más alegres y despreocupados que los Oscar, los invitados están más borrachos (ese Quentin Tarantino) y muchas estrellas tienen su única oportunidad de subir al escenario a recoger algo en toda la temporada.

¿Antesala de los Oscar?

Sí y no. Como casi todos los premios entregados durante la carrera. Quizás los de los gremios son los más fiables (por eso de que son prácticamente las mismas personas que votan en unos y otros, al menos en las nominaciones) pero los Globos son los que más repercusión alcanzan ya sea por juntar a todos y dar una ceremonia al mismo estilo o porque se aseguran siempre un buen plantel de super estrellas nominando grandes nombres y dejando de lado cualquier atisbo indie.

Hay que tomar todo con pinzas, porque otra y principal razón de que no son realmente un indicador de los Oscar es que la Academia se cuida de tener los votos para las nominaciones ya cerradas cuando se celebra la gala. De esta forma si alguien no ha visto Creed y de repente quiere votar hoy por Stallone no puede, porque sus votaciones ya están selladas. Algo así sucedió el año pasado a Amy Adams.

Sí que influye en ayudar a coger momento en los nominados de cara a ganar, pero nada puedes hacer si no has sido nominado. El ganar hoy un Globo de Oro puede significar medio Oscar para Di Caprio porque le ayuda a coger momento y hacer que su nombre se mueva por todas las primeras páginas, y eso ayuda de cara al galardón, pero claro, si no eres nominado tu carrera se termina ahí.

Por ello, rápidamente los grandes vencedores de anoche son sin lugar a dudas Di Caprio, Stallone y The Martian, que en caso de estar nominada se puede colocar muy a la cabeza de las apuestas, y todo ello por colocarla como “comedia” una de esas tácticas de marketing que aquí ha funcionado a la perfección.

¿Significa esto que The Revenant ganará el Oscar?
No lo creo. Spotlight es demasiado “intelectual” para los Globos de Oro y sólo me hace ver algo diferente el hecho de que no ganara el premio al mejor guión (cuando el guión de spotlight es de los de enmarcar y admirar), pero los Globos aman grandes nombres y dejar pasar a Aaron Sorkin (4 Emmy, 2 globos, 1 Oscar) sin premio… 

Como he dicho, The Martian sale colocada muy bien de la ceremonia (esa falsísima ovación en pie a Ridley Scott ¿nos olvidamos de a good year, exodus, kingdom of heaven y Robin Hood?), Room con el premio a Brie Larson (entre ella y Saoirse (pronunciado como Xusa) Ronan parece que está la cosa) y el desinfle definitivo de Brooklyn. El no premio a Carol también nos deja con cara de poco. Pero todo depende de quiénes y cuáles son los nominados.

Esta es mi apuesta de cara a las nominaciones:

Película: 1- Spotlight, 2- Carol, 3- The Martian, 4- Room, 5- The revenant, 6- Mad Max, 7- Bridge of Spies, 8- The Big Short, 9- Star Wars, 10- Brooklyn.

Director: 1- Scott, 2- Spielberg, 3- Iñárritu, 4- Haynes, 5- Abrahamsson

Actriz: 1- Larson, 2- Ronan, 3. Blanchett, 4- Mara, 5- Lawrence

Actor: 1- Di Caprio, 2- Redmayre, 3- Fassbender, 4- Damon, 5- Cranston

En cuanto al apartado televisivo, los Globos siempre van a lo mejor nuevo. Es frustrante como los Emmy siempre votan a los mismos (este año hubo alguna sorpresa) mientras que los Globos de Oro se lanzan a lo nuevo sin importar eso de “mejor”. Pero siempre son bienvenidas las sorpresas.

mi niña favorita Rachel Bloom (she steals pets from popular people) me hizo dar saltos de alegría al ganar el merecidísimo premio a mejor actriz de comedia, por una serie que más gente debería estar viendo, igual que Mozart in the Jungle (Gael ganó) una serie que nadie ha visto (yo la tengo pendiente…) pero es que los Globos de Oro premiaron en su día a series como Glee o Ugly Betty con ¡media temporada! disponible. Así que anotemos la serie, y eso que hemos ganado.

En cuanto a drama, pues lo mejor nuevo, y eso ha sido sin lugar a dudas Mr. Robot. Merecido premio, junto a la despedida de John Hamm por Mad Men y Taraji P. Henson por darnos esa primera temporada de Cookie.

De lo de Gaga ganando, lo siento me quedo con la cara de Di Caprio pensando ¿qué hacer ésta subiendo al escenario? Aunque nos lo imaginábamos, porque al fin y al cabo… 

Son los Globos de Oro! y son tan superficiales como incongruentes y por tanto fascinantes. 


¡Y Rachel Bloom ganó!