SALT (2010) ***

Santa madre holly shit del espírtu santo. Y yo con estos pelos.



Resulta más que curioso que Salt fuese una película que en principio iba a interpretar Tom Cruise porque Salt cobra cuerpo gracias a la interpretación de los morros de Angelina Jolie que le otorgan ese carácter intrascendente, sexy y cachondo. El resto es un capítulo perdido de la serie Alias sin la profundidad ni carisma de la misma pero con el aire festivo, incrédulo y divertido de ella. Salt no descubre ninguna fórmula, bebe demasiado de los Bourne llevándolos hasta la parodia, pero en el fondo es imposible no disfrutarla por su gran sentido del espectáculo y el entretenimiento.

Y es que toda la promoción viene de saber ¿quién es Salt? Ella no lo sabe, y con nosotros juegan que no lo sepamos y tras una trama cargada de giros y más giros creo que al final nadie lo sabe. Pero a ¿quién le importa? Salt está bien buena, es sugerente, lanza granadas a cámara lenta y hace que los maratones de la Potente en “Corre, Lola, Corre” sean meros paseos de señoras que quedan para andar. Salt mola. De hecho es lo mejor de la cinta.



La película comienza con una escena de tortura (imprescindible) a nuestra pobre Angie a cargo de unos chinos muy malos mientras ella grita que es comerciante de petróleo y no una espía (lo que nos quiere decir a todos es que es una espía) y de ahí pasamos a verla enamorada de su marido y el día de su aniversario capturan a un ruso criminal malo al que tiene que interrogar. Angelina con aire de no despeinarse le dice a sus jefes que lo hará en 20 minutos porque tiene que ir a cenar con su marido. Creo que todos nos olemos que esa cena nunca se llevará a cabo. Y yo aquí me imagino a los malos malísimos pensando ¿Cuándo podemos destrozar el mundo? ¿qué día os va bien? Y entonces en una cumbre de esas de mesas alargadas y mapas mundi de fondo todos llegan a la conclusión que lo mejor es hacerlo el día en que la prota celebra el aniversario o el cumpleaños. Solo por joder y porque son malos. Lo de destruir el mundo es secundario, el caso es joder el aniversario a la pobre Jolie. Con lo mona que es ella. Que malotes…

A partir de aquí podría describiros el argumento pero es tan sumamente estúpido, intrascendente y vacío que solo diré que hay unos buenos, también conocidos como estadounidenses, y unos malos, conocidos como país extranjero con acento fuerte, en Salt se vuelve a recurrir a los rusos ¿porqué? ¿no habíamos superado ya a un montonazo de espías y criminales rusos y ahora era el turno de traficantes latinos y árabes? ¿Supone esto el retiro de Jordi Mollá de Hollywood? Empiezo a pensar que ir a Rusia es como entrar en un país donde todos son mentes maestras, frías y calculadoras. ¿Cómo coño ha ganado América a un país así? En fin…

El leimotiv de la cinta lo he visto en Alias, es totalmente verídico que el argumento es un plagio de una de las tramas de la serie, de la que también utiliza el estilo completamente dinámico y constante, la action heroine, el cruce MacGyver inventos cacharros y las pelucas y disfraces pseudoeróticos en mujeres poderosísimas que parecen superheroínas. Creo que es de las primeras veces que si tengo que comparar a Garner con Jolie me quedo con las dos, cada una en su registro.
La diferencia entre Alias y Salt es que la primera (sus 3 primeras temporadas) es una pasada con fondo, con personas detrás de los agentes y con una mitología (Rambaldi). Lo que sí que supo hacer Mission Impossible 3. Todo eso en Salt desaparece por completo y el argumento solo es una excusa para huir desesperadamente ya sea en una autopista saltando de camión en camión, conduciendo un coche a base de descargas eléctricas a un policía inconsciente (ver para creer), en una carrera a tacones o –mi favorita- haciendo parkour por el hueco de un ascensor saltando los pisos de tres en tres y cuyo mayor rasguño es decir “agf” y volver a saltar agarrándose con las uñas.

Con semejantes ingredientes ustedes dirán “Salt huele a fantasmada cutre llena de acción y sin fondo”.
Sí.
Exacto.
Eso es esta película.
Tiene todo lo que he odiado de miles de películas, pero por algún motivo que se me escapa Salt funciona. Seguramente sea la inverosimilitud de todo el conjunto, el descojone interno que me provoca ver todas esas explosiones donde la prota lleva el mejor maquillaje nunca inventado (ya me imagino el anuncio, Rimmel Jolie porque nunca sabes cuando te va a explotar una granada en la cara) y sobre todo lo diarreico de unos giros argumentales de parvulario cada dos por tres. Puede que sea como esas películas de serie B que sabes que son chatarra pero las disfrutas. Eso es Salt una película rematadamente mala pero que sin embargo funciona.

Lo más apreciable y disfrutable es que las escenas de acción dejan de ser esos conglomerados de patadas y puñetazos mientras la cámara se mueve continuamente, aquí vemos bien quién ataca y de donde viene y las escenas de acción están bien ejecutas, dirigidas y montadas, dando además a la cinta un ritmo interno que hace que la sigas con frenetismo y se pasen los 100 minutos como 15.

Así que sí que sí. He disfrutado de Salt, me lo he pasado bien con una película intrascendente, mal escrita, llena de tópicos (el que no sepa quién es el malo a los 10 minutos se merece ser asesinado por los patanes de seguridad de la cinta), cargada de tiros donde solo acierta el bueno, una inverosimilitud de ejecución y deducción, de la que no te crees ni una línea de guión y con saltos imposibles y todo sin despeinarse.

Salt es mala con avaricia, es una basurilla pero que sin embargo funciona con precisión, diversión y entretenimiento. En el fondo me ha gustado como a uno le gustan los Big Macs, sabes que eso de calidad no tiene nada, pero de vez en cuando apetece algo así. Y más si lo envuelven con una actriz potente y una araña en la mochila (no lo olvidemos).

P.D. Me quedé esperando a los créditos porque esperaba un chiste de cachondeo entre el perro y la niña asiática a la que le encarga cuidarlo. Lamentablemente nunca llegoó. ¡Mecachis!

Valoración: 6/10