Vaya por delante que “Blancanieves Mirror Mirror” (Snowwhite: Mirror, Mirror, 2012) , es una película que no debería haber visto nunca la luz del día.
La culpable de todo esto es Alicia en el país de las maravillas, no lo dudemos. Cuando Tim Burton recuperó aquella historia para “adaptarla” a su toque y sobre todo, cuando consiguió convertirse en un taquillazo mundial que fue mucho más allá de las pantallas de cine a la moda, merchandising, libros… cuando sucedió todo aquello a nadie le importó que aquella cinta fuese de lo más flojo de su director. Lo que importó es que se pusieron de moda los cuentos clásicos otra vez (como si hubiesen dejado de estarlo alguna vez) y se abrió la veda a toda una retahíla de anuncios de adaptaciones.
Lo primero lógicamente por inmediatez fue la televisión que nos dio la muy mediocre Grimm y la maravillosa Once upon a Time.
En cine se anunciaron corriendo dos adaptaciones del cuento de Blancanieves, y empezó una guerra por estrenarlas antes, por llenar el reparto de nombre y por tratar de crear una imagen propia.
Poco a poco las cartas se fueron poniendo sobre la mesa y una consiguió un hype mucho más grande que la otra con lo cual había que darse prisa en soltar el producto antes que quedara en nada. Las dos adaptaciones son “Blancanieves, la leyenda del cazador” que recuerda en buena a la épica del señor de los anillos y con una cuidada puesta en escena y la que hoy me ocupa “Blancanieves (mirror, mirror…)” un churro patatero que parece un anuncio de una colonia de los chinos con muchos puntos verdaderamente vergonzosos, carentes de inspiración y sin sentido del ritmo ni gracia.
Lo primero que hay que decir es que esta versión es una comedia, una comedia familiar, una comedia familiar muy infantil con guiños al cuento de lo más simple (y malo) que había, ya no en Shrek, sino en las últimas secuelas del ogro animado.
En esta ocasión venden la novedad de contar la historia desde el punto de vista de la bruja malvada (esta opción dura exactamente quince minutos, luego se olvidan), y se encargan de ir línea por línea intentando meter algún chiste que suena acartonado. Y así aparece Julia Roberts convertida en reina pomposa y caprichosa que tiene a Blancanieves encerrada en el castillo mientras ella juega a una especie de Ajedrez raro. Entonces nos desvelan que están en la ruina y tienen que hacer algo al respecto.
Entonces vemos al príncipe de la historia ser atacado por unos “gigantes” y quedar en el bosque colgado de un árbol junto a su compinche. Blancanieves está harta de vivir en el palacio y cual Jasmine en Aladín se marcha por el bosque cantando a lo caperucita roja y se encuentra con el príncipe y rápidamente se quedan los dos medio enamorados (por supuesto jugarán al despiste, cosa que no entiendo porque no despistan a nadie).
Y claro al llegar el príncipe a palacio Julia Roberts ata cabos y si se casa con el príncipe guapo consigue su propósito de unir fortunas y salir de la crisis (en España se podría hacer caso a la Infanta Elena, pero nadie me hace caso) y para celebrar la fiesta que quiere sube los impuestos al pueblo.
Bueno, llamarle pueblo es un poco presumido, porque es una plaza con quince personas… En serio, allí llega Blancanieves, y a la vez llegan a subir los impuestos y ve que esa gente pasa hambre, y luego cuando vuelve más adelante es la misma gente en el mismo lugar lo que da a entrever que se gastaron todo el dinero en contratar a Julia Roberts y no quedaba más para pueblo…
Entonces… bueno no voy a contar la película pero mandan matar a Balncanieves y acaba viviendo con los enanitos, que por alguna razón inexplicable ahora tienen otros nombres diferentes a los que todos conocemos.
El resto de giros sobre el cuento son tan ineficaces a la hora de mantener la atención que voy a optar por pasar por alto todo lo que sucede después. Únicamente me gustó el giro con la manzana, pero tampoco como para tirar cohetes, que además queda eclipsado en esa escena tan lamentable como la del príncipe actuando como un perrito faldero. De manera literal. En la sala de cine no había carcajadas, ni siquiera sonrisa solo gesto de incredulidad y frases como “bufff, que chorrada de película”
Digno de destacar y que se desprende de los primeros fotogramas de la cinta es que el estilo visual, con una dirección artística muy fastuosa y algunas ideas muy venas como los carruajes trineos y sobre todo el diseño de vestuario está muy cuidado y casi salvan la función, lo que sucede en el baile es tremendamente majadero pero gracias a entretenernos en cada disfraz podemos superar el mal rato que nos propone el guión. Aún así, los diseños van a su bola y es habitual ver que cae la nevada del siglo y todos van en manga corta por el bosque. Blancanieves esta vez guapa, lo que se dice guapa no es, pero oiga, friolera tampoco.
Y es que es otro gran fallo, el casting. La actriz protagonista no convence en absoluto, me pasé toda la película queriendo depilar las cejas de Lilly Collins, además su interpretación es blanda, sosa, falta de carisma y magnetismo… creo que se han lanzado a la piscina dando el protagonismo a una desconocida y les ha salido el tiro por la culata. Por eso no es de extrañar que Julia Roberts termine siendo la protagonista de la cinta, aunque prácticamente no actúe y se note que esté por ahí por un jugoso cheque, porque no nos engañemos, sin ella esto hubiese un producto b de videoclub.
El príncipe azul o como lo queráis llamar es Armie Hammer, que aquí luce su cuerpo a falta de verdadero encanto. Y eso que es un actor que me cae bien, me parece que hizo una gran labor en la red social y en la más reciente J. Edgar, pero aquí… está tan caricaturizado que parece estar haciendo teatro y no cine… tiene unos cambios de registro tan raros tratando de provocar el gag que es antinatural… un gran traspiés la verdad.
Y es que el principal problema de este Mirror Mirror, aparte de ser mala, es que es descuidada, le importa un bledo lo que sucede o cómo sucede, da igual todo la historia solo avanza sin cuidar ningún efecto sobre el espectador. Los personajes actúan como retrasados (Blancanieves se va a enfrentar a la bestia ella sola en lugar de todos juntos) y al final lo único que se preocupa es de lucir bonita.
Tarsem Singh, su director, está tan perdido desde que debutara con acierto en la celda (más por su fotografía, la verdad) y sí es un director muy visual, pero tiene que haber algo que rascar debajo porque sino nos quedas en nada…
Así que no, la película no me ha gustado nada, pero podría haberla dado un pase como entretenimiento infantil mainstream hasta el final. Donde, queriendo poner un happy ending al estilo Slumdog Millionaire de repente se ponen a cantar en uno de los peores momentos que he pasado en una sala de cine. En serio, es tan vergonzoso que no podía mirar a la pantalla. En la película de Danny Boyle, ese trocito baile te hacía salir inspirado, alegre, satisfecho y feliz. En mirror mirror sales indignado y cabreado sabiendo que no han sabido terminar la película y que te han estafado 7 euros de una manera cruel. Lo único bueno y que me hizo partirme de risa es que se ha hartado la poyeya de publicitar su participación en la cinta y ni siquiera la utilizan y dejan la versión original… En fin Soraya, una vez más queriendo ser y aparentando para anotar otro fracaso.
A la salida mi madre decía “¿Cómo se ha metido Julia Roberts en esto?” y yo le dije “Porque ella se hace de oro con películas así mientras nosotros somos tan tontos como para pagárselo”. Una película verdaderamente vergonzosa.
Lo mejor: El vestuario
Lo peor: El final
Valoración: 3/10
Hasta hoy tuve la oportunidad de ver MIRROR MIRROR y estoy de acuerdo en todo lo que comentas acerca de ella. Especialmente ese número Bollywoodesco del final.
ResponderEliminarLa cosa es que yo acababa de ver HOOK por primera vez, y la verdad, es que ya comparándolas las dos, esta sale mejor librada. Será el vestuario, las locaciones, pero como dije, HOOK mepareció deleznable, y esta me quitó el mal sabor de boca...
Claro que eso no le quita nada de lo malo que es!
BLANCANIEVES ES MI PRINCESA FAVORITA!
ResponderEliminarYO CONOZCO ESTAS BLANCANIEVES Y ESTAS MALVADAS MADRASTRAS DE BLANCANIEVES:
ResponderEliminarDISNEY(1937).
JETLAG PRODUCTIONS Y GOODTIMES ENTERTAINMENT(1995).
KRISTEN STEWART Y CHARLIZE THERON(2012).
LILY COLLINS Y JULIA ROBERTS(2012).
TARYN DAVIS,MONICA KEENA Y SIGOURNEY WEAVER(1997).
KRISTIN KREUK Y MIRANDA RICHARDSON(2001).
ELIZABETH MCGOVERN Y VANESSA REDGRAVE(1984).
DIANA RIGG,NICOLA STAPLETON Y SARAH PATTERSON(1987).