jueves, 5 de agosto de 2010

SEXO EN CHUECA (CRÍTICA TV) - 8,5

Por fin una sitcom bien hecha




La verdad es que hoy he dormido mal, de estos días que te despiertas a las 6 de la mañana y das vueltas y más vueltas, te bebes media garrafa de agua y vas al baño cada dos por tres. Es decir, tenía una resaca de tres pares de narices.
Y era incapaz de dormir.
Cosas del que inventó la resaca que me encantaría asesinar.

El caso es que para intentar conciliar el sueño me he puesto la televisión y la oferta a las 6 de la mañana es bastante lamentable (no es que más tarde la cosa mejore sustancialmente, pero ese es otro tema). Así que he disparado el videoclub de ojo en Ono y tras varias vueltas con pereza he dado con que estaba desde el capítulo 1 la serie “Sexo en chueca”, una serie que la emiten en la 7, el canal de la TDT que suele ser un contenedor de Telecinco en el que no sabe muy bien qué emitir.

He puesto el invento para ver como podría ir la cosa, ya había leido que la serie se basaba en un formato que se hizo para los móviles y que tras la buena acogida la hicieron formato sitcom y un lavado de caras (esto es actores nuevos) para su puesta de largo en la TDT.



Con esa premisa y viendo que gran parte del planten provenía de Al Salir de Clase, escuela de grandes actores (ironic mode) como Elsa Pataky y Sergio Peris Mencheta, y que la estrenaban directamente en TDT sin pasar por el canal grande, la cosa cuanto menos prometía devolverme al estado de inconsciencia.
Esa era mi intención, recuperar mis sueños perdidos (¿adónde irán los sueños que nunca son soñados?), el resultado ha sido otro completamente.

Sexo en Chueca resulta todo un hallazgo en el panorama televisivo español, sexo en chueca es ágil, dinámica, rápida, fresca, descarada y divertida y encima es mucho menos gayer de lo que mis estómagos necesitaban. Como spoiler: Me he tragado los 7 capítulos que había uno detrás de otro.

Resumiendo de lo que va la serie se trata de la llegada a chueca de un heterosexual puro que le acaba de dejar su novia. Coincide con que a un amigo suyo de años atrás se le marcha un compañero de piso y le recoloca en chueca. Allí le confiesa su homosexualidad y le presenta a las compañeras de piso, dos hermanas, la mayor lesbiana perdida y la pequeña puta empedernida. En el piso de al lado, que para algo esto es muy sitcom, vive una pareja gay uno joven y otro gordo y mayor. La hija del mayor regenta el bar (siempre tiene que haber uno) de la serie.
Como buena comedia de situación cada uno tiene sus líos con gente ajena y propia del grupo.

Lo bueno de la serie es que con personajes bien definidos hacen después lo que quieren y los van moldeando y ofreciendo su personalidad. Hay varias cosas de esta serie que me han gustado, os las cuento:

El primer punto a favor: la duración.
Estoy hasta las narices de que las series españoles se alarguen hasta la hora y media, que sean tan estiradas y que la mitad de las escenas sirvan para vender Puleva o mensajería (¡viva el Internado!), las sitcom americanas duran 20-23 minutos. Eso es suficiente y es lo que hace que los chistes y los argumentos se mantengan en su envase, sin rodeos innecesarios. Sexo en chueca dura eso, las tramas episódicas empiezan, se desarrollan y terminan con agilidad y brevedad, sin vueltas moralistas ni repetición de chistes hasta el agotamiento.

Más puntos a favor: los personajes

Esperaba encontrarme con todo un esteriotipo de amaneramientos risibles al estilo de Aída. Esperaba también ver locazas practicando sexo todo el rato, estilo queer as folk. Ni una cosa ni la otra. Por fin una maldita serie que normaliza la homosexualidad, creo que hasta hacía falta. En Sexo en Chueca hay una pareja gay, un gay liberal, un heterosexual, una lesbiana, una heterosexual ninfómana y una chica bisexual muy perdida. Pero todos estos matices los delimitan con quién se meten a la cama, no hay aceites desmesurados ni rascaduras de huevos para que ubiques a los personajes. No. Son personas normales como cualquiera de hoy en día que luego se besan y se acuestan con quien les gusta y apetece. Chapeau para la serie.

Respecto al tema del sexo… amantes del morbo barato. No hay escenas de sexo. Todo el sexo que hay en la serie es oral, es decir hablado, lo comentan, dicen que se han acostado con tal y cual, pero lo hacen con una naturalidad y simpleza que elimina lo burdo del asunto, destilan lo zafio y queda de lo más sencillo y elegante, a la par que divertido. Otro tanto.

Los actores. Otro acierto.
Como os he dicho cualquier marca de fábrica de Al Salir de Clase para mi es una tara considerable. De allí salvaba a Pilar López de Ayala y porque ha demostrado más tarde que ella es actriz. Me dan pereza estos actores que se pensaban que se iban a comer el mundo, que eran semi dioses que lo tenían todo hecho por una cara bonito y unos abdominales de gimnasio. Puede que sea envidia, no lo niego, pero también hemos asistido a unas interpretaciones lamentables por parte de varios de ellos, en mi retina todavía resuena el recitar de guión de Menos es más.

El protagonista de Sexo en Chueca es Octavi Pujades, uno de los protagonistas de aquella maravilla (ironic mode again) llamada Lalola. En esta serie aunque el reparto es bastante coral, sí que se puede decir que es la cara reconocible. La verdad es que desconocía la faceta de actor Octavi. Aquí resulta convincente, con matices y bastante cómico gestualmente, comedido pero muy entero en el papel y sobre todo tiene la sensación de estarse divirtiendo cosa que contagia al espectador.

El otro actor protagonista es Nacho López, de la misma cantera y del que me sorprende la naturalidad con la que lleva el personaje a cabo incluso en situaciones poco creíbles. Y aquí incluyo al resto del reparto al completo (es breve pero compacto), el guión roza el absurdo en determinados momentos para forzar la comedia, y es muy difícil que con este material (bueno pero arriesgado), el actor no acabe cayendo en los tics y la exageración. Pero no, los siete actores saben llevar bien los personajes y la serie sin excederse y con mucha naturalidad. Un acierto, de verdad.

Pero antes de cerrar el capítulo de actores hay que destacar a Dafne Fernández. Es cierto que su personaje es un bombón para cualquier actriz, que contiene las escenas más divertidas y que gran parte de su éxito viene hecho de fábrica de un buen guión. Pero eso no le resta mérito. La promesa de UPA se confirma en que es más que unas tetas bonitas, con un personaje en la línea de la Applegate en “Matrimonio con hijos”, Dafne Fernández encarna con sencillez a una promiscua divertida, tontorrona y simplona, a una actriz de 3ª con ganas de triunfar de cama en cama. Y lo dignifica y lo hace sencillo. Otorga candidez y empatiza perfectamente con la cámara.

Tercer acierto. El guión.
Por fin se huye de los gritos, los insultos, las voces, la ridiculización y los golpes de gag. Aquí hay un guión, con sus diálogos bien escritos que son los que hacen que sonrías.
“-Ya está le he puesto a ese cerdo los puntos sobre las ies.
-Que te lo has tirado ¿no?
-Sí, pero casi sin interés. Que se joda.”
Los capítulos están muy bien escritos, hay redondez en lo que cuentan y además dejan hilos argumentales de un capítulo al siguiente. La base de toda casa son los pilares, para mi de una serie es un guión inteligente. Sexo en la chueca tiene buena base.

Y el cuarto acierto. La dirección y la realización ágil.
La serie va rápido, se desenvuelve con destreza y manifestar todo eso otorgando frescura y naturalidad es complicado. Bueno, qué narices en España pocos casos se han dado (ejemplos como Mis adorables vecinos o la familia mata). Aquí sí que hay eso.

También hay errores, nada es perfecto, por ejemplo los actores episódicos sí que caen en la sobreactuación y chirrían completamente como el vendedor de la tienda o la novia americana, también técnicos principalmente de sonido (muy evidentes con personajes en la misma escena a volúmenes dispares, pero todo ello se ve cubierto por el eficaz entretenimiento que produce el conjunto.

Por resumir todo lo que he escrito (entusiasmado todo sea dicho). Sexo en chueca es una comedia de situación bien escrita, mejor realizada y genial interpretada. Además es sencilla, sincera, fresca y entretenida, con diálogos desternillantes y sin más pretensiones que ser un entretenimiento eficaz, no dañino y honesto. Sexo en chueca es una revelación y una isla de comicidad en un panorama desértico. Lástima que Telecinco no la lleve a su primer canal. Aunque casi mejor que no, no vaya a ser que nos la estropeen. Podría seguir escribiendo, pero creo que lo mejor es que se metan en la web de telecinco y vena gratis los episodios, merece la pena.

NOTA:8,5/10

2 comentarios:

  1. Lamentable, homófoba, retrógrada, ridícula, estúpida y de muy mal gusto. No entiendo como nadie puede hablar bien de esa porqueria. Si fuese cualquiera de los actores involucrados, iría bajando la cabeza por la calle. En este país no se saben hacer buenas series, y mucho menos sitcoms. Que vayan aprendiendo de joyas como "Hot in Cleveland"

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  2. Esta serie es buenísima y muy acertada tu reseña, en México está causando revuelo

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