La verdad es que tenía mucho que escribir sobre todo o acontecido en el programa “La Noria” de Telecinco el pasado sábado. Para el que no se haya enterado porque vive al margen de esta cadena, lo primero mi enhorabuena más sincera, lo segundo es que el programa en cuestión llevó a la madre del presunto asesino de Marta del Castillo, una joven aparentemente asesinada a cargo de unos amigos. El caso sigue en el ojo público porque la chica aún no ha aparecido y porque los presuntos culpables (que se declararon culpables) no dejan de dar pistas erróneas sobre su paradero lo que crispa aún más a todo bicho viviente y hace que me cabree incluso escribiendo esto.
El caso es que el programa en cuestión ha pagado 10.000 euros a la madre del presunto asesino por una entrevista que me negué en rotundo a ver y que no voy a comentar si fue buena o mala, aunque me lo puedo imaginar dado el amarillismo que se gastan en el programa. Pero ya sabéis que solo opino de lo que veo y he visto cosas malas por el simple hecho de poder decir que así me lo parecía. Así que la entrevista a la madre del “Cuco” pudo haber sido de Pulitzer o de juzgado de guardia, que yo no comentaré porque me negué en rotundo a verla.
Ahora bien, he visto un par de fragmentos porque uno vive en el mundo y me parece una vergüenza que la mujer no enseñe la cara. Pero solo es mi opinión.
El caso es que la entrevista ha levantado ampollas ya no por la información que pudo ofrecer, sino que desde antes ya era criticada, el presentador de la misma, un Jordi González que cada acepta peor las críticas (“tu puta madre guapa”), defendió la misma alegando su valor informativo y el hecho de que su madre no tenía la culpa de los actos de su hijo.
Lo primero es discutible, porque ese supuesto “valor informativo” podía hacer mucho daño a bastante gente y mi ética (profesional y personal) me impediría hacer daño deliberadamente por mero morbo. Porque eso es lo que vendían, un globo de morbo sucio, el valor informativo de la entrevista es más que dudoso.
Lo segundo es de juzgado de guardia. Porque es cierto que la madre del presunto homicida no tiene la culpa de los actos de su hijo, de hecho la justicia no la condena por ello, pero eso lo entendería si ella en sí misma tuviera valor y peso suficiente para ser entrevistada. Me explico, imaginemos que ella es una cantante reconocida o una actriz o acaba de ganar un premio, por supuesto merece la entrevista aún a pesar de los actos de su hijo, pero no es el caso ella se ha ganado la entrevista por ser madre de, y va a beneficiarse de ello, por lo tanto hay un conflicto de intereses que me hace despreciar el acto de esta mujer.
Y que no me venda nadie que ha ido a defender el honor de su familia, porque entonces lo habría hecho a cara descubierta y sin cobrar un duro o donando ese dinero a la búsqueda de Marta del Castillo, entonces me quitaría el sombrero y arroparía a esta señora, pero lo que ha hecho es beneficiarse económicamente de que su hijo haya podido matar a una joven y ese acto me parece tan sumamente despreciable que me faltan las palabras para definir a esta “señora”. Seguro que está pensando en parir otro monstruo para ganarse otros 10.000 euros.
El caso es que la noticia sigue, los internautas recogen firmas y mientras tanto esa repudia general tanto en las redes sociales como la opinión pública ha conseguido algo con fuerza y es que varios anunciantes hayan decidido retirar su publicidad del programa de manera permanente como condena por dicha entrevista. Y eso sí que es más dañino a la cadena que las críticas negativas, la mala imagen o los insultos, porque la publicidad es la que da de comer al programa y un veto constante podría llevar a cabo la cancelación del programa.
No lancemos campanas de boda porque de momento han sido 7 empresas, bastante grandes pero no son todas las que son: Panrico, Banco Sabadell, Nestlé, Puleva, Campofrío, Bayer y President. Pero es un paso, puede que haya cierta publicidad gratuita metida a cuña, cierto lavado de marca alejándose del perro pulgoso a toro pasado (la entrevista se sabía de antes y en ningún momento retiraron su publicidad la noche antes, claro porque se preveía gran audiencia…). Hay cinismo en estas empresas, es cierto, pero si todas siguieran su ejemplo la televisión en España tendría que ceder un poco a las voluntades del pueblo y sobre todo a un código de ética y respeto hacia el público en general y ciudadanos inocentes en particular.
En resumen, esto de dichas marcas es un paso, pero ¿dónde estaban cuando se hicieron aquellos especiales tan vergonzosos en los que salían exnovias de los implicados? ¿Cuál era la diferencia entre aquellos reportajes y esta entrevista? No es que defienda esto, sino que condeno ambos porque como os decía trato de tener una opinión formada y desinteresada de los productos que veo y consumo, y no nos dejemos engañar ni por unos ni por otros porque las empresas tienen unos intereses detrás y los realizadores de la noria otros, en nuestra mano está el saber dilucidarlos y criticarlos.
No es presunto asesino. Es presunto encubridor.
ResponderEliminarNi la entrevista ni los periódicos.